Toluca, Edoméx.- A unos días de que la Fiscalía General de Justicia del Estado de México iniciara la búsqueda de Raymundo Martínez Carbajal, presidente municipal de Toluca, para aprehenderlo, no hay ni rastro del alcalde. De acuerdo a los indicios, Raymundo “N” habría tenido tiempo de sobra para escapar a la acción de la justicia, es decir que recibió el “pitazo” varias horas antes de que iniciara el cinematográfico operativo para arrestarlo.
El pasado jueves 23 Raymundo “N” encabezó la Sesión de Cabildo de Toluca y se preparaba para un día después dar una conferencia de prensa con motivo de su rendición de protesta como Presidente de la Federación Nacional de Municipios de México (FENAMM) en el Estado de México. En la tarde noche del jueves Raymundo “N” convocó a los medios de comunicación a dicha conferencia que estaba programada a las 14:15 horas del viernes pasado, es decir 4 horas antes de que iniciara el operativo. De lo anterior se puede deducir que hasta el jueves en la noche el alcalde prófugo no tenía idea de lo que se le venía.
A las 13 horas con 19 minutos los medios de comunicación recibimos el aviso de que la conferencia se cancelaba, es decir 56 minutos antes de la hora en la que estaba programada la conferencia. Resulta ilógico pensar que Raymundo “N” recibió el “pitazo” minutos (incluso unas pocas horas) antes de que se avisara dela cancelación de la conferencia de prensa.
Si tan escandaloso operativo encabezado por la FGJEM, con el apoyo de Fuerzas Federales, fue un fracaso, es porque muchas horas antes de la movilización policial Raymundo “N” ya se había esfumado y, para ello, alguien con acceso a información de privilegio debió filtrarle la información sobre su inminente aprehensión, es decir que le dio el “pitazo”. Así, Raymundo “N”, a sabiendas de que su próxima parada sería la cárcel, con tiempo de sobra, recursos ilimitados y una red de complicidad, se dio a la fuga.
¿Cómo un personaje público de tal envergadura puede pasar inadvertido al traspasar las fronteras del municipio, el estado y quizás el país? Solamente con un “pitazo” a tiempo. Además de localizar al alcalde de Toluca y cumplimentar la orden de aprehensión en su contra, la Fiscalía tiene también la obligación de investigar quién le filtro la información para facilitar su huida.
Es una incógnita en donde se esconde Raymundo “N” y como es que pudo fraguar una evasión de tal magnitud. También lo es si lo aprehenderán o no, pero, lo que sí está más que claro, es que no regresará a la presidencia municipal de Toluca y que sus afanes de reelección se quedarán en eso, en puros afanes.
