Hasta el momento, la fiscalía de Aguascalientes mantiene como principal línea de investigación del asesinato del secretario con funciones de magistrado del Tribunal Electoral de Aguascalientes, Ociel Baena, un posible crimen pasional, no obstante que aún existen dudas al respecto de esta versión.
La familia del occiso, particularmente el padre, ha declarado en entrevista que están dispuestos a aceptar esta versión de la fiscalía, que refiere un supuesto homicidio y posterior suicidio de su pareja sentimental, Dorian Nieves, no obstante señala también que aún exiten inconsistencias que la fiscalía debe aclarar primero.
A escasas horas de que se supiera del homicidio de «el magistrade», miles de personas salieron a manifestarse en ciudades de todo México, denunciando, entre otras cosas, escepticismo acerca de la versión oficial del crimen pasional.
Y aunque la fiscalía sostiene que no tiene evidencia alguna de un tercero al interior del inmueble; esta versión podría tener sus inconvenientes.
Fotografía de la escena del crimen; a la izquierda se observa la camioneta de las víctimas delante de una patrulla. @JLMNoticias
Y es que las declaraciones prematuras de los funcionarios titulares de la fiscalía y de la Secretaría de Seguridad de Aguascalientes, estarían sustentadas principalmente en supuestas grabaciones del exterior del inmueble, donde no se registraba la presencia de un tercero.
La familia de la víctima se ha quejado, que hasta el momento la fiscalía no les ha presentado la totalidad de las supuestas grabaciones, donde se verifique que en realidad nadie entró al inmueble desde que fue deshabitado un par de días antes por la pareja que salió a vacacionar al estado de Oaxaca.
Sin embargo, en un reportaje divulgado por Imagen Noticias, se incluye un fragmento de las grabaciones del fraccionamiento, que supuestamente serían las mismas que estaría usando la fiscalía de Aguascalientes para descartar el ingreso de una tercer persona al inmueble.
No obstante, dicha grabación, además de observarse con escasa nitidez y gran oscuridad, muestra un ángulo donde apenas y se alcanza a observar de forma lejana, la parte frontal del inmueble.
Sin embargo, en una investigación realizada por esta redacción, hemos geolocalizado de forma precisa, el inmueble que pertenecía a Ociel Baena, es decir, el domicilio de Playa del Carmen 134, del fraccionamiento Punta del Cielo, en Aguascalientes.
Con base en el registro de imágenes satelitales del año 2023 de dicho fraccionamiento, se puede comprobar que la parte posterior del inmueble, daba parcialmente a un predio baldío, el cual a su vez, colinda con una barda perimetral del fraccionamiento, la cual colinda con un predio baldío del exterior.
Flecha roja indica la casa del magistrado. Líneas punteadas indican posible ruta de acceso desde el exterior del fraccionamiento a través de terrenos baldíos.
Es decir, una persona, bien pudo haber saltado la barda del fraccionamiento, la cual es de tan solo un par de metros de altura y no cuenta con electrificación ni algún sistema complejo para evitar intrusiones, cruzar el terreno baldío, y brincarse la barda de la parte posterior del inmueble de Ociel Baena.
Vista del terreno baldío al exterior del fraccionamiento, cercano a la casa de Ociel Baena. Se alcanza a observar la pequeña barda perimetral.
Desde luego, para que alguien hiciera esto con tranquilidad, información de los elementos de seguridad privada, pudieran haber aportado conocimiento clave acerca del estado desocupado del inmueble.
Claro que se trata solo de una hipótesis, no obstante la fiscalía no ha informado si la ha tomado en cuenta, ni si han realizado profundas investigaciones de criminalística, para descartar posibles rastros de una intrusión por la parte posterior del inmueble.
Y aunque suene quizá un tanto descabellado, quizá sea menos descabellada que la versión del homicidio y suicidio que refirió de forma prematura la fiscalía de Aguascalientes.
En todo caso, lo que sí debería quedar descartado, es que una grabación que solo registra una entrada de la casa en cuestión, pueda considerarse una prueba definitiva, pues existe la posibilidad de una intrusión desde la parte posterior del inmueble; una situación que debería investigarse con mayor responsabilidad de parte de las autoridades correspondientes.
