De acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2020 del INEGI, en el Estado de México el 11.3 por ciento de la población tiene 60 años o más, lo que equivale a un millón 919 mil 454 personas, de las cuales, 791 mil 384 se encuentran en situación de pobreza, y más del 18 por ciento de los hogares mexiquenses son encabezados por una persona adulta mayor.
Por su parte, el Consejo Estatal de Población (Coespo) estima que, para el 2030 habrá 2 millones 972 mil 420 personas mayores, lo que representa un incremento del 54 por ciento y, por lo tanto, una demanda más elevada de servicios, entre ellos, los que se refieren a la salud.
Según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) en su publicación Pobreza y Personas Mayores en México 2020, el porcentaje de personas adultas mayores en situación de pobreza en el país fue del 37.2 por ciento.
En el caso del Estado de México, las estimaciones indican que el 6.1 por ciento de la población de la entidad son adultos mayores, y de éstos, para el año 2018, el 37 por ciento se encontraban en condición de pobreza, es decir, 486 mil 900.
Con el objetivo de apoyar a este grupo de edad y mejorar su calidad de vida, durante el sexenio del Gobernador del Estado de México, Alfredo Del Mazo Maza, fue creado el Programa Familias Fuertes Apoyo a Personas Adultas Mayores, el cual consiste en la entrega de canastas alimentarias a los mayores de 60 años y en condición de pobreza o que se encuentren en alguna contingencia.
En el Sexto Año de Gobierno se entregaron 902 mil 844 canastas alimentarias en beneficio de 100 mil personas adultas mayores, de las que, siete de cada 10 se destinaron a mujeres. A lo largo de la administración se otorgaron 8 millones 078 mil 855 canastas con este programa.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre 2015 y 2050, el porcentaje de los habitantes del planeta mayores de 60 años casi se duplicará.
En México, la tendencia es similar, ya que en la actualidad la población adulta mayor representa aproximadamente el 12 por ciento; sin embargo, se estima que, para 2050, la proporción se incrementará a 22.5 por ciento.
El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA, por sus siglas en inglés) señala que el envejecimiento de la población demanda una eficiente coordinación entre actores institucionales, sociales y políticos para la consolidación de las políticas públicas orientadas a atender y anticipar los cambios demográficos.
