- 42% de los embarazos de niñas entre 11 y 14 años de edad son producto de una violación, estupro o incesto por parte de algún integrante de su familia.
- Para prevenir embarazos en niñas y adolescentes es necesaria la acción inmediata por parte de la Fiscalía General de Justicia, la Secretaría de las Mujeres, la Secretaría de Educación Ciencia Tecnología e Innovación, la Secretaría de Salud del Estado de México; así como de todas y todos aquellos quienes buscamos la erradicación de la violencia de género.
CCME Edoméx, Toluca, Estado de México, 12 de abril de 2024.- El Proyecto Libélula, con base en el registro nacional de nacimientos de niñas y adolescentes, arrojó preocupantes cifras de embarazos entre el 2015 y el 2022; de los tres casos de niñas de 11 años embarazadas, en todos se desconoce al papá; de los 62 embarazos en niñas de 12 años, en 43 no se supo quién fue el padre; de los 605 embarazos en menores de 13 años, se desconoció en 252 quién es el padre; de los 4 mil 52 casos en niñas de 14 años, no se sabe quién es el papá en mil 176; y en los 15 mil 762 casos de las niñas de 15 años, no se sabe del papá en 3 mil 538.
Ante este escenario, la presidenta del Consejo Coordinador de Mujeres Empresarias Capítulo Estado de México, Fabiola Pérez Serrano, reconoció que los embarazos en niñas y mujeres adolescentes, además de ser un tema de educación sexual integral para la juventud, es una expresión de violencia estructural en su contra.
“Se trata de una tendencia preocupante. Los embarazos infantiles y adolescentes pueden tener graves consecuencias para las jóvenes, sus familias y sus comunidades, al ser consecuencia de los abusos de poder y manipulación por parte de una pareja mayor o una persona cercana a su círculo.”
Este proyecto indicó que el 42% de los embarazos de niñas entre 11 y 14 años de edad son producto de una violación, estupro o incesto por parte de algún integrante de su familia, que, además, no son denunciados. Fabiola Pérez manifestó que las consecuencias de los embarazos adolescentes en el Estado de México pueden ser graves, llegando a provocar un aumento de la violencia intrafamiliar, erosión de los derechos de las mujeres y las niñas, así como aumento de los niveles de pobreza.
“Muchas adolescentes embarazadas se enfrentan con dificultades para acceder a la atención médica, la educación y las oportunidades de empleo. Como consecuencia, a menudo permanecen atrapadas en relaciones abusivas, donde su educación y su futuro se ven gravemente comprometidos.”
La presidenta del CCME Edoméx mencionó que el contexto alarmante que enfrentan las niñas y adolescentes en sus círculos más cercanos necesitan de acción inmediata por parte de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, la Secretaría de las Mujeres, la Secretaría de Educación Ciencia Tecnología e Innovación, la Secretaría de Salud del Estado de México y todas y todos aquellos que queremos que las niñas y adolescentes vivan en contextos libres de violencia de género.
“Desde el Consejo Coordinador de Mujeres Empresarias Estado de México estamos trabajando en acciones orientadas a niñas, niños y adolescentes para que puedan identificar los abusos y las violencias de las que pueden ser víctimas, así como para que podamos construir relaciones afectivas libres de violencia.”
Finalmente, Fabiola Pérez reconoció la importancia de trabajar junto al Gobierno para crear un futuro más seguro y equitativo para todas las niñas del Estado de México.
