Toluca, Edomex, 18 de agosto del 2023.- La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), cumplimentó orden de aprehensión en contra de Manuel Alejandro “N”, por su presunta intervención con el homicidio del empresario Íñigo Arenas, ocurrido el pasado 6 de agosto al interior del bar Black Royce.
Con la captura de este hombre de 41 años de edad, suman siete las personas detenidas e investigadas por su presunta intervención con la muerte de Íñigo Arenas, quien habría llegado al bar la madrugada de ese domingo, y en su interior, ingirió bebidas, a las que unas mujeres le pusieron gotas de alguna sustancia, que provocaron que se pusiera mal y terminara por perder el conocimiento y su posterior muerte.
De acuerdo con la indagatoria, en este hecho delictivo habrían estado involucradas siete personas, de las cuales Aritzi Abril “N”, Ana Karen “N”, Cecilia “N”, Ana Karen “N”, Eduardo “N” y Carlos Daniel “N”, actualmente se encuentran vinculadas a proceso; en tanto que Manuel Alejandro “N” fue detenido el 17 de agosto en la colonia El Corralito, municipio de Naucalpan, mediante una acción operativa realizada por agentes de la Policía de Investigación.
Con los datos de prueba recabados durante los actos de investigación, un juez de control concedió la orden de aprehensión en contra de siete posibles involucrados, la cual quedó totalmente cumplimentada con la detención de Manuel Alejandro “N”.
Producto de las entrevistas en sede ministerial y evidencia recabada, se precisó que desde el arribo de Iñigo Arenas al “Black Royce”, fue atendido por un mesero a quien se identifica como Manuel Alejandro “N”, quien a pesar del horario y de que la víctima se encontraba en evidente estado inconveniente lo persuadió en conjunto con los individuos antes señalados de continuar ingiriendo bebidas de contenido alcohólico.
Motivo por el cual a las 04:59 horas, junto con Eduardo “N”, capitán de meseros y las cuatro mujeres detenidas, lo habrían persuadido a trasladarse al área identificada como “VIP” que se encuentra en la planta alta del establecimiento, lugar donde la víctima finalmente habría perdido la vida y del que fue trasladado y colocado en diverso sitio de la planta baja del inmueble, sin que exista evidencia de que los imputados hubieran alertado de manera oportuna a los servicios de emergencia para su atención.
Esta detención permitirá establecer ante el juez, el operandi que el Ministerio Público establece en su teoría fáctica.
