Reporte de: Francisco Javier López Miranda/Apocaliptic
Toluca, México, 4 de diciembre de 2017.- Representantes de productores de flor de Tenancingo, denunciaron presiones que van desde amenazas “con pistola en mano” hasta sabotaje a su actividad comercial y productiva, por parte del presidente municipal de Villa Guerrero, Tito Maya de la Cruz.
Esta mañana, en conferencia de prensa, Valentín García Cruz, delegado de Santa Ana Ixtlahuatingo, Tenancingo, acompañado de productores de flor de esa demarcación, acusaron al alcalde citado, de filiación perredista, de pretender sabotear las actividades del tradicional mercado de la flor, para fomentar el nuevo centro comercial, el cual fue construido en terrenos propiedad del munícipe implicado.
Según el declarante, esta comisión –quienes dieron la conferencia de prensa – representa a siete mil productores de flor de Tenancingo.
De acuerdo con los denunciantes, las acciones de Tito Maya van desde colocar un retén en la autopista Tenango-Ixtapan de la Sal, a la altura del puente, con la policía municipal, en supuesta complicidad con la federal, para desviar a los clientes y proveedores de fertilizantes y otros insumos, hasta amenazas con quitarles al agua, no venderles los bulbos para siembra y otras presiones.
A pesar de la gravedad de las quejas, los denunciantes no presentaron copias de una supuesta presentación de denuncia ante el Ministerio Público, sólo documentación que acredita la solicitud a las secretarías de Gobierno y de Desarrollo Agropecuario, para mediar en este problema.
Tampoco dieron a conocer imágenes del supuesto retén; sin embargo, sí presentaron imágenes de su mercado de flores.
De igual forma, acusaron al alcalde de Tenancingo, Roberto Sánchez Pompa, de indiferencia ante la problemática que ellos calificaron como muy grave de consecuencias impredecibles.
Incluso, un sector de los mismos denunciantes acusó que el problema central es que Tito Maya, quiere obligar a los comerciantes de Santa Ana Ixtlahuatingo, a vender en el nuevo mercado de Villa Guerrero, el cual, afirman que es propiedad del munícipe perredista.
