Redacción Apocaliptic.com
4 de mayo 2016.- El gobernador de Ohio, John Kasich, se retiró finalmente de la carrera presidencial del Partido Republicano, dejando como único candidato al magnate Donald J. Trump, quien se encuentra sin rival para alcanzar la nominación presidencial.
El día de ayer Trump arrolló una vez más a los candidatos Kasich y Ted Cruz, lo que propició la inmediata renuncia de Cruz a la carrera por la nominación presidencial.
Cruz tenía casi la mitad de delegados de Trump, y tiró la toalla tras fracasar el último intento que había hecho para detener al magnate, pedirle a Kasich no hacer campaña en ciertos estados, para buscar competirle al polémico Trump; no obstante, ni eso fue suficiente para siquiera competirle en Indiana.
Kasich, quiene tiene menos del 15% de delegados que se ha asegurado Trump; todavía anoche se mostraba optimista, y señalaba que ahora sólo se trataba de elegir entre dos caminos radicalmente diferentes.
No obstante este miércoles desde temprano comenzaron a circular versiones de que el gobernador de Ohio dimitiría, lo cual finalmente se ratificó a través de una conferencia de prensa, donde confirmó que también abandona el proceso electoral del partido.
«Siempre he dicho que el Señor tiene un propósito para mí, así como lo tiene para todos, y al suspender hoy mi campaña tengo una fe renovada y más profunda de que el Señor me mostrará el camino y que cumpliré el propósito de mi vida», señaló Kasich,
A Trump sólo le falta ser ratificado en la Convención Republicana, no obstante que las posibilidades de quitarle la nominación y dársela a alguien más, han sido practicamente diluidas ante la ausencia de rivales, por lo que ya es casi un hecho que Donald J. Trump será el candidato de los republicanos en la elección presidencial para elegir al sucesor de Obama.
De parte del Partido Demócrata ya es casi un hecho que Hillary Clinton será la candidata y rival de Trump, no obstante que se sigue desgastando y exhibiendo sus puntos frágiles en el proceso interno que mantiene contra Bernie Sanders; si fuera sólamente por el voto en los estados, la competencia estaría bastante reñida; no obstante es el mayoritario voto de los superdelegados del Partido Demócrata, quienes están volcados con Clinton, lo que le otorga la confianza y ventaja para obtener la nominación demócrata, la cual aún se extenderá por varias semanas.
