Después de haber generado polémica en meses recientes, finalmente este miércoles se publicó un decreto del gobierno del Estado de México, por medio del cual se instruye desistir el recurso de revisión que pretendía dar continuidad al megaproyecto inmobiliario Bosque Diamante, en el municipio de Jilotzingo.
Este proyecto, que se anunció en 2017, pretendía construir una zona residencia con 20 mil viviendas en un bosque de encino adyacente a una amplia área de conservación ambiental.
Esta área natural, que será conocida ahora oficialmente como el parque «Espíritu Santo», finalmente ha sido decretada como zona de conservación ambiental, «en términos de lo dispuesto en el Código para la Biodiversidad del Estado de México».
Aunque un juez de distrito del Estado de México, había emitido un recurso de revisión, después de que se había congelado la obra, finalmente el ejecutivo estatal decretó el desistimiento de esta revisión.
En semanas recientes, incluso habían circulado peticiones en plataformas como Change.org, donde habían firmado casi 300 mil personas solicitando evitar la destrucción de este bosque, y considerar al área como zona natural protegida.
De este modo, el gobierno encabezado por Alfredo del Mazo Maza, ha respondido de forma positiva a la solicitud, y ha decretado la protección del área, lo que obligará la cancelación de los planes de proyecto residencial.
El proyecto inmobiliario, emprendido por la familia Funtanet, hubiera representado la tala de alrededor de 200 mil árboles.
La sentencia que había frenado el proyecto, también había concluido la imposibilidad de avanzar con el desarrollo inmobiliario, sin haber concluido de forma satisfactoria la evaluación de impacto ambiental.
