Tras el fallecimiento del Papa Francisco, el próximo mes de mayo se realizará el proceso para elegir al nuevo papa, en una elección interna del Vaticano; y aunque no se encuentran entre los favoritos, hay varios cardenales latinoamericanos que cumplen los requisitos para aspirar a votar y ser votados.
El contexto de América Latina en la sucesión papal
La elección del argentino Jorge Mario Bergoglio como Papa Francisco rompió con siglos de predominio europeo en el Vaticano, señalando la creciente relevancia de América Latina en la Iglesia Católica. La región no solo alberga a millones de fieles, sino que también enfrenta desafíos como la pobreza, la desigualdad y la secularización, temas que Francisco ha abordado con énfasis en la misericordia y la inclusión. Esto ha llevado a especular que el próximo Papa podría provenir nuevamente de esta región, consolidando su influencia en la dirección de la Iglesia.
Entre los factores que posicionan a los cardenales latinoamericanos como posibles sucesores se encuentran su experiencia pastoral en contextos complejos, su cercanía a las reformas de Francisco y su capacidad para conectar con una feligresía diversa. Además, el Colegio Cardenalicio, encargado de elegir al Papa, cuenta con una representación significativa de la región, lo que aumenta las posibilidades de un candidato latinoamericano.
Principales aspirantes latinoamericanos
Aunque la lista de “papables” es dinámica y depende de las circunstancias del cónclave, varios cardenales latinoamericanos destacan por su trayectoria y alineación con los valores del pontificado actual. Algunos de los nombres más mencionados son:
Odilo Pedro Scherer (Brasil, 75 años)
Arzobispo de São Paulo, una de las diócesis más grandes del mundo, Scherer combina experiencia pastoral con un perfil administrativo sólido. Fue considerado un candidato fuerte en el cónclave de 2013, gracias a su trabajo en una arquidiócesis marcada por la diversidad social y religiosa. Su enfoque moderado, que equilibra tradición y apertura al diálogo, lo hace atractivo para sectores progresistas y conservadores. Sin embargo, su edad podría ser un factor limitante en un cónclave que busque un Papa más joven.
Leonardo Steiner (Brasil, 74 años)
Arzobispo de Manaos, Steiner es un franciscano cuya labor en la Amazonía resuena con el énfasis de Francisco en la ecología y los pueblos indígenas. Su perfil humilde y su compromiso con los marginados lo alinean con la visión de una Iglesia “pobre para los pobres”. Aunque menos conocido internacionalmente, su trabajo en una región estratégica para la Iglesia podría ganar apoyo en un cónclave.
El caso de México: Carlos Aguiar Retes y Francisco Robles Ortega
México, el segundo país con más católicos en el mundo (unos 100 millones), es un epicentro del catolicismo latinoamericano, fortalecido por el culto a la Virgen de Guadalupe, un símbolo de identidad religiosa y cultural. Dos cardenales mexicanos, Carlos Aguiar Retes y Francisco Robles Ortega, han sido mencionados como posibles candidatos a suceder a Francisco, aunque su probabilidad depende de diversos factores.
Carlos Aguiar Retes: un líder progresista con visión global
Nacido el 9 de enero de 1950 en Tepic, Nayarit, Carlos Aguiar Retes es el arzobispo primado de México desde 2017, nombrado por el propio Papa Francisco. Su trayectoria es amplia: fue obispo de Texcoco, arzobispo de Tlalnepantla y presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) entre 2011 y 2015. Además, es miembro de varias comisiones vaticanas, como la del Diálogo Interreligioso y la de América Latina, lo que le otorga visibilidad en la Curia Romana.
Aguiar Retes se distingue por su enfoque pastoral, que combina la evangelización con un compromiso social en temas como la migración, la violencia y la desigualdad. Su cercanía a Francisco, tanto ideológica como personal, lo posiciona como un continuador de las reformas actuales, especialmente en la promoción de una Iglesia más sinodal y dialogante. Como custodio de la Basílica de Guadalupe, tiene una conexión única con la devoción popular, un aspecto que podría resonar con cardenales que buscan un
Sin embargo, a sus 75 años, Aguiar Retes está cerca del límite de edad para ser elector en un cónclave (80 años), lo que podría generar dudas sobre la duración de un eventual pontificado. Además, aunque es respetado, no cuenta con la misma proyección internacional que otros candidatos, como Tagle o Parolin.
Francisco Robles Ortega: un perfil tradicional con experiencia administrativa
Francisco Robles Ortega, nacido el 2 de marzo de 1949 en Mascota, Jalisco, es el arzobispo de Guadalajara desde 2012, una de las arquidiócesis más importantes de México. Ordenado sacerdote en 1976, ha ocupado cargos relevantes, como presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (2012-2018) y miembro de la Congregación para los Obispos en el Vaticano. Su nombramiento como cardenal en 2007 por Benedicto XVI consolidó su influencia.
Robles Ortega es conocido por su estilo sobrio y su defensa de los valores tradicionales, aunque ha mostrado apertura a iniciativas pastorales que refuercen la fe en contextos urbanos. Su experiencia administrativa y su trabajo en una arquidiócesis con fuerte arraigo católico lo convierten en una figura sólida, pero su perfil más conservador podría limitar su apoyo entre los cardenales progresistas que buscan continuidad con Francisco.
A sus 76 años, Robles Ortega enfrenta el mismo desafío de edad que Aguiar Retes. Además, su menor exposición en foros internacionales podría reducir sus posibilidades frente a candidatos con mayor presencia global.
Otros cardenales mexicanos
México cuenta con otros cardenales, como Alberto Suárez Inda (85 años), Felipe Arizmendi Esquivel (84 años), Juan Sandoval Íñiguez (92 años) y Norberto Rivera Carrera (82 años). Sin embargo, todos superan el límite de edad para participar en un cónclave, por lo que no son considerados candidatos viables, aunque podrían influir en las discusiones previas.