Este jueves se han registrado intensos bombardeos en Yemen, uno de los países más pobres del mundo, quien está siendo atacado por el ejército de los EEUU, en coalición con otros 6 países.
El ataque contra Yemen, incluida su capital Saná, se registra particularmente porque ha sido el único país cuyo gobierno ha anunciado su determinación de combatir militarmente el genocidio perpetrado por el régimen de Israel en Gaza.
El gobierno de facto de Yemen, encabezado por los Houthíes, además de estar enviando milicianos para apoyar la resistencia en Gaza, también ha estado cometiendo actos de sabotaje contra barcos israelíes que cruzan por el Mar Rojo, y que tienen por origen o destino algún puerto de Palestina ocupada (Israel).
Esta serie de bombardeos de occidente serían una represalia por los ataques en el Mar Rojo, donde se ha logrado detener el curso de varios buques que mantienen vínculos o negocios con el estado terrorista de Israel y sus aliados.
A través de un comunicado, el gobierno de Joe Biden reivindicó los ataques, confirmando que se realizaron bajo dirección del ejército estadounidense.
Las agresiones realizadas vía aérea se habrían realizado «junto con Reino Unido y con el apoyo de Australia, Bahréin, Canadá y los Países Bajos».
El gobierno de Biden reconoció que se han registrado al menos 27 ataques en el Mar Rojo, lo que estaría afectando también la cadena de suministros.
«Estos ataques selectivos son un mensaje claro de que Estados Unidos y nuestros socios no tolerarán ataques contra nuestro personal ni permitirán que actores hostiles pongan en peligro la libertad de navegación en una de las rutas comerciales más críticas del mundo», señaló el régimen estadounidense.
Ante estos hechos, Rusia convocó de urgencia al Consejo de Seguridad de la ONU, mismo que ayer había aprobado también un exhorto a los houthíes para cesar sus actos hostiles en el Mar Rojo.
Cabe señalar que Yemen ha sido objeto de ataques al menos desde 2014, y en este país se han registrado también algunas de las más amplias manifestaciones en solidaridad con Palestina alrededor del mundo.
Esta nueva agresión de occidente podría agitar aún más las tensiones en Medio Oriente; organizaciones como Hezbollah han salido a condenar el ataque, y advertir también acciones en respuesta contra las bases militares estadounidenses que permanecen en la región.
