En un reciente y lamentable incidente, un delfín perdió la vida en el delfinario del Hotel Barceló, ubicado en la Riviera Maya, Quintana Roo. Este suceso ha vuelto a poner bajo el reflector las condiciones en las que se mantienen a los cetáceos en cautiverio en este complejo hotelero.
Según informes y denuncias de activistas, el delfín habría muerto tras impactarse contra el concreto de su recinto. Los detalles específicos aún están bajo investigación, pero lo que se sabe es que este evento ocurrió mientras el animal realizaba una pirueta, parte de un entrenamiento o espectáculo para los huéspedes del hotel.
#Entérate A través de redes sociales activistas denunciaron la muerte de dos delfines en los últimos meses en el hotel Barceló en la Riviera Maya #QuintanaRoo
En el video se observa a un delfín realizando piruetas y poco después cae sobre el concreto, lo que pudo haberle… pic.twitter.com/cX4xoBlRze— QuintanaRooNews (@quintanaroonews) February 1, 2025
Las acusaciones de maltrato animal y condiciones inadecuadas han sido constantes en torno a este delfinario, uno de los más pequeños de México, con dimensiones que apenas superan los 20 metros de largo y 3 de profundidad, lo cual es visto por muchos como insuficiente para el bienestar de estos mamíferos marinos.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ha abierto un procedimiento administrativo para investigar no solo este incidente reciente, sino también las condiciones generales en el delfinario. En menos de un año, se han reportado la muerte de al menos dos delfines, identificados como Plata y Alex, lo que ha intensificado las críticas y la preocupación de grupos defensores de los derechos animales. Estos grupos, como Animal Héroes y Dolphin Freedom Mx, han denunciado que los delfines están sujetos a un estrés significativo debido al confinamiento, la exposición constante al sol, y la falta de enriquecimiento ambiental, lo que podría estar contribuyendo a estas muertes.
Las manifestaciones públicas han sido organizadas para exigir el cierre definitivo del delfinario, con activistas y simpatizantes protestando en diversas localidades de México y hasta en España, donde también opera el grupo hotelero. La comunidad en redes sociales ha expresado su indignación, con varios usuarios compartiendo imágenes y videos del incidente, pidiendo a la empresa responsable, Barceló, y a Dolphinaris, la firma que gestiona el lugar, que tomen medidas inmediatas para evitar más sufrimientos.
