Israel irrumpe violento en sede humanitaria de la ONU en Jerusalén y desata nueva condena internacional

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Fuerzas armadas del régimen genocida de Israel irrumpieron por la fuerza este 8 de diciembre en la sede de la Agencia de Naciones Unidas para los refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) en el barrio de Sheikh Jarrah, en la Jerusalén del Este ocupada por los sionistas.

Fue una operación militar que involucró que se rompieran las cerraduras, entraran vehículos policiales, se hiciera un corte total de las comunicaciones al interior del complejo, además de que se confiscaron equipos informáticos, inmuebles, documentos y bienes materiales.

Los militares israelíes también derribaron la bandera de las Naciones Unidas en el edificio y la reemplazaron por la bandera del Estado fascista de Israel.

Raquel Martí, Directora Ejecutiva Comité Español de la @UNRWAes, condenó la agresión.

Condena internacional

Este nuevo ataque contra la organización humanitaria generó una amplia condena internacional. El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, condenó la entrada no autorizada al complejo de Sheikh Jarrah, afirmando que este complejo es inviolable e inmune a cualquier otra forma de interferencia.

«Insto a Israel a tomar inmediatamente todas las medidas necesarias para restaurar, preservar y mantener la inviolabilidad de los bienes de la ONU y a abstenerse de tomar cualquier acción adicional con respecto a estos en línea con sus obligaciones bajo la Carta de las Naciones Unidas y otras obligaciones bajo el derecho internacional», señaló Guterres.

También Felipe Lazzarini, el comisionado general de la UNRWA, señaló: «La policía israelí rompió nuestro complejo de Jerusalén del este temprano esta mañana, representando un nuevo desafío al derecho internacional. Esta acción más reciente representa un flagrante desprecio de la obligación de Israel como estado miembro de las Naciones Unidas de proteger y respetar la inviolabilidad de la ONU. Permitir esto representa un nuevo desafío al derecho internacional, uno que crea un precedente peligroso en cualquier otro lugar donde la ONU esté presente en el mundo».

Asimismo, Lazzarini reiteró que la Corte Internacional de Justicia ha subrayado que Israel está obligado a cooperar con la ONU y otras agencias de la ONU, y denunció que se sustrajeron documentos oficiales y se incautaron también múltiples bienes y equipos.

Jonathan Fowler, el portavoz de la UNRWA, también afirmó que la agencia contactó múltiples veces a las autoridades israelíes para recordarles sus obligaciones bajo la Convención de la ONU; no obstante, los llamamientos habrían sido ignorados de parte del régimen sionista.

Pretextos infundados

Como es habitual, el régimen israelí emitió pretextos poco claros, afirmando que había una deuda de impuestos por parte de estas instalaciones, tomando esto como el pretexto para la violenta irrupción al interior.

No obstante, la UNRWA sostuvo que no debe impuestos municipales toda vez que goza de una exención fiscal como agencia de la ONU, por lo cual el operativo viola obligaciones internacionales, incluyendo dictámenes de la Corte Internacional de Justicia donde se obliga al régimen de Israel a cooperar con la agencia internacional.

Aunque no se tiene reporte de heridos, este incidente se marca en la campaña de Israel contra la UNRWA perpetrada desde tiempo atrás y donde incluye también una serie de ataques y acusaciones infundadas y un continuo hostigamiento hacia los trabajadores humanitarios.

Violaciones al cese al fuego

La UNRWA también documentó que el régimen de Israel ha violado al menos 738 veces el cese al fuego que había entrado en vigor el pasado 10 de octubre. Estas violaciones documentadas hasta este 9 de diciembre de 2025 incluyen ataques de artillería, incursiones terrestres, así como bloqueos de ayuda humanitaria. Según los reportes de la UNRWA, esto ha provocado al menos 357 muertes y 903 personas heridas de forma directa.

No obstante, esto también ha intensificado la situación de genocidio y hambruna contra la población de Gaza, lo que ha agravado la situación humanitaria con el colapso sanitario y de infraestructura en Palestina, particularmente en Gaza.

La ONU ha insistido en las últimas semanas en la obstrucción de ayuda y la entrada de ayuda humanitaria, y el rompimiento de los acuerdos que el mismo régimen de Israel había firmado.

Cabe señalar que de los palestinos que han sido asesinados en estas semanas recientes, al menos 67 eran niños, documentó la misma UNRWA el pasado 28 de noviembre.

La misma agencia denunció que Israel retiene cerca de 6,000 camiones con ayuda humanitaria, lo que representa suministros para 3 meses y que incluyen también miles de tiendas y mantas para 1.3 millones de desplazados.

Asimismo, la ONU reiteró que en Gaza el acceso al agua sigue siendo un desafío. A pesar de los 90,000 m³ de agua que se enviaron en el mes de noviembre, estos han sido obstruidos también por las Fuerzas Armadas del régimen leal a Benjamin Netanyahu.

La UNRWA también denunció que uno de cada cuatro niños han resultado heridos en Gaza, además de que se tiene el mayor grupo de niños amputados en la historia moderna.

A pesar de la grave crisis humanitaria, Israel sigue siendo solapado y protegido por sus cómplices internacionales, principalmente por el gobierno de Donald Trump.








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