Llegó la hora de firmar; cae la mano derecha de Zelenski en operativo anticorrupción. Mindich se esconde en Israel

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El gobierno de facto de Volodimir Zelenski se encuentra en un momento crítico tras la renuncia de Andriy Yermak, uno de los más altos mandos y miembros cercanos al mandatario ucraniano, luego de que se informara sobre cateos en sus propiedades en el marco de la investigación MIDAS.

Esta operación anticorrupción ya ha señalado también a más de 10 funcionarios ucranianos en un esquema de desvío millonario de recursos y además pega de forma directa en las negociaciones de paz, toda vez que se trataba del jefe de la delegación que justo estaba por despegar rumbo a Miami para las negociaciones de paz con Estados Unidos.

La caída de Yermak: el poder real de Ucrania

Andriy Yermak no solo era conocido como la mano derecha de Zelenski, amigo y socio desde que el actual presidente era un comediante y quien se ha mantenido siempre a su lado, al grado que en 2023 Politico lo llamó el poder real de Ucrania. También fue incluido por Time en la lista de 100 personas más influyentes del mundo en 2024.

La cercanía entre Zelenski y Yermak era tal que Zelenski llegó a declarar hace cuatro años: «Él vino conmigo, él se irá conmigo», en alusión a su poderoso gerente, a quien también se le consideraba el poder real en Ucrania o bien la billetera del mandatario ucraniano.

Christopher Miller, corresponsal en jefe del Financial Times en Kiev, quien calificó a Andriy Yermak como «la persona más cercana a Zelenski desde el inicio de la Operación Especial», también lo describe como alguien que «a menudo se comportaba como si fuera presidente, elaborando planes de paz, dirigiendo la diplomacia secreta, seleccionando cuidadosamente a los miembros del gabinete y tomando decisiones militares.»

Se trata de un golpe político para Ucrania, pues era tal la confianza y cercanía con Zelenski que él había sido nombrado el jefe de la delegación para las negociaciones de paz sobre el plan de 28 puntos propuesto por el presidente Trump y que iba a llevarse a cabo este fin de semana.

El funcionario informó en sus redes sociales que estaba consciente del operativo y que iba a colaborar en las investigaciones. Horas más tarde se confirmó que presentó su renuncia como jefe de la oficina de presidencia de Ucrania. Posteriormente, en entrevista con el New York Post, afirmó que se estaría lanzando al frente de batalla, criticando también la forma en la cual se está abordando la investigación.

«He sido mancillado y mi dignidad no ha sido protegida, a pesar de haber estado en Kiev desde el 24 de febrero de 2022. Por eso no quiero crear problemas a Zelenski, me voy al frente» (…). Me repugna la suciedad que se ha dirigido contra mí y aún más la falta de apoyo de quienes conocen la verdad«, declaró en entrevista con el medio estadounidense.

Zelenski y Yermak

Mindich se refugia en Israel

Yermak al menos estaría tomando una salida más digna que la realizada por Tymur Mindich, quien según las investigaciones de la operación MIDAS era el líder y cabecilla de la trama que desviaba cientos de millones provenientes de sobornos con contratistas de la empresa energética nuclear ucraniana.

Aunque ha trascendido poco en medios occidentales, según reportes del Times of Israel, Mindich encontró refugio en Israel hace unos días. Cabe recordar que primero viajó a Polonia, tras recibir una curiosa «alerta» que le permitió salir del país, justo cuatro horas antes de que empezaran los cateos en su contra, logrando así evadir de forma oportuna la acción de la justicia.

Tras su paso por Polonia, consiguió viajar a Israel, donde estaría en estos momentos protegido también por el régimen de Benjamín Netanyahu, en uno de los estados más conocidos por la protección a criminales.

La respuesta de Zelenski y el futuro de las negociaciones

Zelenski salió a dar un mensaje reconociendo la renuncia de Yermak y confirmando no solo la necesidad de una «renovación total» en la Oficina de Presidencia, sino también que la misión para las negociaciones de paz continúa, afirmando que será encabezada por personal militar y de inteligencia sin precisar aún cambios en la comitiva.

A pesar de que Zelenski dejó abierta la cita con su contraparte estadounidense, la situación se encuentra en gran tensión y aún con cierta incertidumbre acerca de si se llevará a cabo.

Cabe recordar que en el marco de la investigación por corrupción también está siendo investigado Rustem Umerov, el secretario de seguridad y ex ministro de defensa ucraniano, además de otros funcionarios como Oleksandr Zukerman, otro financiero clave también ciudadano israelí y que de igual forma se fugó hacia Israel, donde se mantiene a pesar de que ya se habría emitido una solicitud de extradición en su contra.

Otros funcionarios como Herman Halushchenko, el ex ministro de energía, y la que era actual ministra de energía, Svitlana Hrynchuk, también fueron destituidos del cargo. No obstante, en el caso de otros como Ihor Fursenko, un asociado de confianza de Mindich, fue detenido por las autoridades ucranianas, aunque habría pagado una fianza de más de 2 millones de dólares.

Cabe señalar que Umerov, a pesar de estar siendo también parte de las investigaciones, sería uno de los miembros de la delegación ucraniana que estarían viajando a la reunión clave de Miami.

El ultimátum de Washington

Este cúmulo de acciones en contra del círculo cercano a Zelenski tiene la apariencia de ser también una especie de ultimátum. Toda vez que, como se ha reportado semanas atrás, países occidentales y concretamente en el caso de Estados Unidos, instancias como el FBI estarían también formando parte de las indagatorias encabezadas por NABU (Buró Nacional Anticorrupción de Ucrania) y apoyando también las investigaciones de la Fiscalía especializada anticorrupción de Ucrania.

Es decir, Estados Unidos habría sido quien ha estado presionando para realizar estas investigaciones que, a fin de cuentas, están derribando a parte importante del gabinete del presidente de facto de Ucrania, Volodimir Zelenski.

Reacciones desde Rusia

Desde luego que en Rusia también ha habido reacciones al respecto. El Vicepresidente del Consejo de Seguridad de la Federación de Rusia Dmitri Medvédev, quien en días atrás se burlaba de Zelenski por el nombramiento de Yermak como el jefe de las negociaciones, ironizando también su similitud con Mindich, salió este viernes también a comentar la detención, reiterando que el gobierno corrupto de Kiev se ha derrumbado.

También señaló que «el bufón es ilegítimo», además de que el colapso de su sistema es inevitable. Como siempre con su estilo incisivo, también señaló: «Puede que siga sentado en su oficina esnifando cocaína por la nariz, pero no será él quien firme el tratado de paz».

Mientras que Ucrania agiliza la movilización para avanzar hacia las negociaciones, al parecer también en Rusia se preparan para un posible avance. Este viernes, Viktor Orbán, el primer ministro de Hungría, se reunió con el presidente ruso Vladimir Putin en el Kremlin, donde se habrían abordado precisamente asuntos del conflicto con Ucrania.

A recordar que Orbán se ha ofrecido como mediador y también ha insistido en Budapest como una sede para una posible cumbre de paz que incluya tanto a Rusia como a Ucrania e incluso también a Estados Unidos.

Presión militar y política

Es así que mientras la presión en el frente militar también avanza, en lo político el gobierno de Kiev también parece estar acorralado y con una enorme presión encima. Las recientes detenciones han empezado a generar protestas en Ucrania y no se descarta incluso una posible remoción o revuelta ante los reclamos, puesto que mientras millones de ucranianos han sido sacrificados y han tenido que ser desplazados, divididos o enviados al frente de batalla, la cúpula empresarial cercana a Zelenski se ha beneficiado de forma millonaria mediante actos de corrupción que vienen a contradecir severamente también la posición de su gobierno.

Pareciera que la necesidad de firmar se ha vuelto urgente para Zelenski, buscando encontrar una situación que no sea tan desfavorable, ya no solo pensando en Ucrania, sino también pensando en su destino inminente.








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