Este 18 de octubre de 2025, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) anunció la reapertura del Área de Protección de Flora y Fauna (APFF) Nevado de Toluca, uno de los sitios ecoturísticos más emblemáticos del Estado de México. Ubicado a 4,680 metros sobre el nivel del mar, este volcán inactivo —conocido también como Xinantécatl en náhuatl— es el cuarto pico más alto de México y alberga los lagos del Sol y de la Luna, considerados los de mayor altitud en el país.

La reapertura introduce una modalidad turística renovada, enfocada en el senderismo y el montañismo, con el propósito de equilibrar el acceso público con la preservación de sus ecosistemas.

Contexto del cierre y la reapertura

El Nevado de Toluca permaneció cerrado al público desde el 10 de agosto de 2025, tras un accidente vehicular ocurrido en una zona de alta pendiente, a unos tres kilómetros de Las Antenas. Una camioneta que transportaba turistas volcó y cayó más de 50 metros ladera abajo, dejando varias personas lesionadas, entre ellas menores de edad. El cierre respondió a la necesidad de evaluar y fortalecer las medidas de seguridad, considerando también factores como las bajas temperaturas, las nevadas y la operación de guías no autorizados que incrementaban el riesgo para los visitantes.

Esta medida formó parte de una estrategia de turismo responsable, que ya incluía cierres parciales desde 2021 para permitir el desplazamiento de la fauna silvestre. La reapertura se realizó una vez que la CONANP y autoridades locales, como el municipio de Zinacantepec, verificaron las condiciones de seguridad necesarias para reactivar las visitas de forma ordenada y sostenible.

Nueva modalidad turística

La nueva etapa prioriza las actividades de bajo impacto ambiental, como el senderismo y el montañismo, a través de rutas controladas. La principal es el “Sendero del Arriero”, que incluye el recorrido por el “Paso del Quetzal”, con un trayecto estimado de cuatro horas de ida y vuelta. Este recorrido está delimitado y señalizado para evitar el tránsito por zonas ecológicamente frágiles y reducir la erosión del suelo y la afectación a la vegetación de altura.

Regulaciones y recomendaciones principales

Para proteger la biodiversidad del Nevado de Toluca, se implementaron nuevas regulaciones, entre ellas:

• Acceso exclusivo peatonal: No se permite el ingreso de vehículos al cráter ni a las lagunas, con el fin de disminuir riesgos y contaminación.
• Registro y control de aforo: Los visitantes deberán registrarse previamente mediante un sistema oficial, que limita el número de personas por día.
• Revisión de equipo: Se requiere portar equipo adecuado para senderismo o montañismo, el cual será verificado antes del ingreso.
• Restricciones específicas: No se permiten drones, mascotas ni equipo inadecuado de escalada, para evitar daños a la flora y fauna.
• Monitoreo permanente: Habrá puntos de control y vigilancia coordinada entre autoridades federales y estatales, así como avisos sobre condiciones climáticas adversas.

Las autoridades recomiendan seguir las indicaciones del personal capacitado y contar con una preparación física adecuada para las exigencias del terreno. También se impulsan actividades alternativas en el Parque de los Venados para operadores turísticos afectados por el nuevo esquema de acceso.

Importancia ambiental y cultural

Desde su declaratoria como Área de Protección de Flora y Fauna en 2013, el Nevado de Toluca se ha consolidado como un símbolo natural y cultural del Estado de México. Su ecosistema alberga especies endémicas y cumple funciones esenciales como la captación de agua y la regulación del clima. Además, posee un valor espiritual para diversas comunidades indígenas que lo consideran una montaña sagrada.

La reapertura busca no solo impulsar el turismo sustentable, sino también fortalecer la educación ambiental y el desarrollo local a través de servicios turísticos certificados y guías comunitarios.

Perspectivas futuras

La CONANP informó que mantendrá un monitoreo continuo para evaluar los impactos de la afluencia turística y realizar ajustes en las políticas de manejo del sitio. El objetivo es garantizar la seguridad de los visitantes y preservar el equilibrio ecológico.

La reapertura del Nevado de Toluca representa un paso hacia un turismo más seguro, responsable y respetuoso con la naturaleza, convirtiendo un episodio de riesgo en una oportunidad para reforzar la conservación de uno de los paisajes más emblemáticos de México.