Este lunes, la ciudad de Toluca se convirtió en un mar de rojo y blanco para celebrar el título número 11 del Deportivo Toluca FC, conquistado tras una contundente victoria de 2-0 sobre el América en la final del Clausura 2025. La afición escarlata, tras 15 años de espera, desbordó las calles de la capital mexiquense en un festejo histórico que culminó con un desfile masivo y un emotivo evento en la icónica Glorieta del Águila.
Un Recorrido de Pasión Escarlata
La jornada comenzó con una energía inigualable. Desde las primeras horas de la tarde, miles de aficionados se congregaron en los alrededores del Estadio Nemesio Díez, conocido como «La Bombonera», punto de partida del desfile triunfal. A las 16:00 horas, dos autobuses descapotados, decorados con los colores del club, salieron rumbo a la Glorieta del Águila, escoltados por un operativo de seguridad que apenas podía contener la marea de seguidores.
Las calles de Toluca, incluyendo Morelos, Bravo, Independencia, Juárez, Hidalgo y Villada, se tiñeron de rojo mientras los aficionados coreaban cánticos como “¡Sí se pudo!” y la emblemática “Cumbia de los Trapos”.
Alexis Vega, capitán y figura estelar del torneo, lideró la caravana, luciendo una corona que simbolizaba su rol protagónico en el campeonato. Los jugadores, acompañados por el técnico Antonio “Turco” Mohamed, interactuaban con la afición, firmando camisetas y devolviéndolas a la multitud, en un gesto que avivó aún más la euforia.
A pesar de una lluvia previa, el clima no apagó el entusiasmo. La caravana avanzó lentamente debido a la gran cantidad de aficionados que abarrotaban las calles, obligando a ajustes en el operativo de seguridad. El recorrido, que duró cerca de dos horas, fue una muestra de la conexión profunda entre el equipo y su ciudad, con banderas, fuegos artificiales y cánticos resonando en cada esquina.
🎉⚽ ¡Vibramos de emoción con el recorrido de los #DiablosRojos Del #Toluca! ⚽🎉👹👺
Fue un momento de alegría en los corazones de la afición mexiquense. #CampeonatoDeClausura2025. pic.twitter.com/fODYe4V45F
— Congreso del Estado de México (@CongresoEdomex) May 27, 2025
El Corazón de la Fiesta
El punto culminante de la celebración tuvo lugar en la Glorieta del Águila, en el cruce de Paseo Colón, un lugar icónico que volvió a ser territorio escarlata. Desde las 17:00 horas, miles de aficionados se reunieron alrededor del monumento, que fue iluminado de rojo en honor al equipo. La policía cerró el acceso al área para garantizar la seguridad, mientras la afición esperaba ansiosa la llegada del equipo.
A las 19:00 horas, los Diablos Rojos llegaron al templete preparado para la ocasión, acompañados por sus familias, quienes observaban desde un área especial. Los jugadores, liderados por Alexis Vega, Paulinho y Héctor Herrera, levantaron el trofeo del Clausura 2025 ante el delirio de la multitud. Antonio Mohamed tomó el micrófono para agradecer a la afición por su apoyo incondicional, destacando que “este título es para ustedes, que nunca dejaron de creer”. Vega, ovacionado como héroe, dedicó unas palabras a la ciudad: “Toluca es mi casa, y este campeonato es nuestro orgullo”.
La celebración en la Glorieta del Águila se extendió hasta las 20:00 horas, con música, fuegos artificiales y un ambiente de hermandad. La “Cumbia de los Trapos” resonó una vez más, acompañada por cánticos de “Campeones, campeones, ¡oeoeoe!”. Incluso hubo momentos de humor, como cuando se escuchó por error una canción asociada al América, lo que provocó risas y cánticos burlones de los aficionados.
Un Título que Une
El triunfo del Toluca no solo significó la conquista de la onceava estrella, sino también la reafirmación de una identidad. La ciudad, que había esperado 15 años para volver a celebrar un campeonato, vivió un día inolvidable. Desde los edificios públicos iluminados de rojo hasta los cánticos que resonaron hasta altas horas de la noche, Toluca demostró por qué es una de las aficiones más apasionadas del fútbol mexicano.
El desfile y el evento en la Glorieta del Águila quedarán grabados en la memoria de los toluqueños como un momento de unidad, orgullo y celebración. Con este título, los Diablos Rojos no solo superaron al América en la cancha, sino que recuperaron su lugar en la cima del fútbol mexicano, con la promesa de seguir peleando por más glorias.