La Diputación Permanente de la LXII Legislatura del Estado de México, instalada este miércoles para el segundo periodo de receso del primer año constitucional, asumió el compromiso de dar continuidad a las labores parlamentarias con responsabilidad y enfoque social.
Este órgano, presidido por el diputado Maurilio Hernández González, del partido Morena, se encargará de atender los asuntos legislativos y jurisdiccionales pendientes durante el receso del Pleno, asegurando la tramitación oportuna de los temas de interés para la población mexiquense.
Durante la sesión de instalación, Hernández González destacó que la Diputación Permanente trabajará con cuidado y sensibilidad, manteniendo una colaboración estrecha con autoridades estatales, federales y los 125 municipios del estado.
Asimismo, señaló que, en función de la relevancia de los asuntos por resolver, se podrán convocar periodos extraordinarios para deliberar sobre temas prioritarios que beneficien a la ciudadanía.
La Diputación Permanente está conformada por un equipo plural de legisladores. El diputado Héctor Raúl García González, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), ocupará la vicepresidencia, mientras que la diputada Yareli Anai Esparza Acevedo, del Partido del Trabajo (PT), fungirá como secretaria.
Como vocales participan las diputadas Martha Azucena Camacho Reynoso, Graciela Argueta Bello y el diputado Octavio Martínez Vargas, de Morena; las legisladoras Emma Laura Álvarez Villavicencio (PAN) y Ruth Salinas Reyes (Movimiento Ciudadano); así como el diputado Alejandro Castro Hernández, del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
De acuerdo con la Ley Orgánica del Poder Legislativo, la Diputación Permanente opera durante los periodos de receso de la Legislatura, representándola y asumiendo las funciones establecidas por la normatividad. Su integración se formaliza mediante su publicación en la Gaceta del Gobierno y concluye al iniciar el siguiente periodo ordinario de sesiones.
La LXII Legislatura mexiquense cuenta con dos periodos ordinarios de sesiones al año: el primero, del 5 de septiembre al 18 de diciembre, y el segundo, del 31 de enero al 15 de mayo. Durante los recesos, la Diputación Permanente asegura la continuidad del trabajo legislativo, con la posibilidad de convocar a sesiones extraordinarias según lo dispuesto por la ley.
Con esta estructura, la Diputación Permanente se posiciona como un pilar clave para mantener la actividad legislativa en el Estado de México, respondiendo a las necesidades de la población y garantizando el cumplimiento de las responsabilidades parlamentarias.