En un esfuerzo conjunto entre la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), el Gobierno estatal, la Comisión de Búsqueda de Personas (COBUPEM), células municipales, familiares, colectivos y la sociedad civil, se ha logrado localizar a 4,896 personas reportadas como desaparecidas en el Estado de México entre 2024 y los primeros dos meses de 2025. De este total, 4,614 fueron encontradas con vida, lo que representa un 94.2%, mientras que 282 fueron localizadas sin vida. Solo 43 casos (0.9%) habrían sido víctimas de algún delito.

El trabajo coordinado ha permitido que siete de cada diez personas reportadas como desaparecidas sean localizadas, destacando la importancia de la colaboración interinstitucional y social. Según Rodrigo Daniel Cárdenas Palencia, titular de la Unidad de Análisis y Contexto para la Investigación de Delitos Vinculados a Feminicidio, Homicidios Dolosos y Desapariciones de Niñas y Mujeres, más del 93% de las personas encontradas con vida (4,293) refirieron que su ausencia fue voluntaria, motivada por factores como conflictos familiares, problemas de salud, adicciones, cuestiones económicas o psicológicas, y no por delitos.

Las investigaciones de la FGJEM revelan que las desapariciones no siempre están vinculadas a actos criminales. De las 282 personas localizadas sin vida, 239 fallecieron por causas como accidentes, suicidios o problemas de salud, mientras que 33 fueron víctimas de homicidio doloso y 10 de feminicidio. En los casos de localización sin vida, se realizan peritajes forenses especializados —antropología, odontología y genética— para identificar a las víctimas y determinar las circunstancias de su muerte, especialmente cuando la identificación visual no es posible.

Entre las personas localizadas con vida, 235 fueron víctimas de delitos como secuestro, privación de la libertad, violencia familiar, sexual, de género o explotación laboral. La Unidad de Análisis y Contexto identificó que las mujeres adolescentes de 12 a 17 años representan el 50.8% de las desapariciones femeninas, asociadas principalmente a conflictos sociales y familiares, mientras que en hombres el grupo más afectado es de 30 a 59 años, con un 38.1%.
Las principales causas de ausencia se agrupan en seis categorías: condiciones de vulnerabilidad (38%), conflictos familiares (21.6%), relaciones personales (14.18%), problemas de salud, adicciones y victimización delictiva. Cada caso, sin embargo, requiere un enfoque individualizado, ya que las circunstancias varían según el perfil de la persona desaparecida.

Un dato significativo es que el 65% de las personas fueron localizadas en los primeros cinco días tras el reporte, el 9.8% entre el sexto y décimo día, y el 7.2% el mismo día en que se inició la investigación. Esto refleja la importancia de la denuncia inmediata, que en el Estado de México no requiere esperar 72 horas, como erróneamente se cree. “La sociedad sabe que puede acudir a cualquier institución para buscar auxilio”, afirmó Cárdenas Palencia, destacando una mayor conciencia ciudadana.

En el periodo del 1 de enero de 2024 al 28 de febrero de 2025, se iniciaron 7,111 investigaciones por desaparición, de las cuales el 70% ya han sido resueltas con la localización de las personas. Los municipios con mayor incidencia son Ecatepec (12.4%), Toluca (9.8%), Naucalpan (5.9%), Nezahualcóyotl (5%) y Chimalhuacán (4.5%).

La FGJEM emplea protocolos especializados que incluyen la emisión de boletines de búsqueda, análisis de zonas de desaparición, entrevistas con entornos cercanos y rastreo institucional en hospitales, corporaciones policiacas y registros nacionales. Además, se analizan dispositivos y redes sociales de las víctimas para obtener pistas. Sin embargo, desafíos como el cambio de residencia, fallecimientos desconocidos por los familiares o la falta de comunicación dificultan algunos casos.

Cárdenas Palencia subrayó que, aunque el Estado de México tiene un alto índice de localización en comparación con otros estados, aún hay personas pendientes de encontrar. “No podemos descartar que muchas de las no localizadas estén en una situación de ausencia voluntaria, pero nuestra responsabilidad es seguir buscándolas”, afirmó.