Joven agente de la Guardia Nacional asesinada por sargento tras denunciar acoso; GN le dijo a la familia que fue accidente

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La muerte de Stephany Carmona Rojas, una joven agente de 20 años de la Guardia Nacional (GN), ha conmocionado a la opinión pública tras revelarse que había denunciado acoso sexual por parte de un superior jerárquico, el sargento segundo Yair Manuel “N.”, quien presuntamente la asesinó durante una práctica de tiro en un batallón de Acapulco. En un principio, la GN informó a la familia que se trataba de un accidente, pero la investigación apunta a un feminicidio motivado por represalias.

Denuncias previas y omisiones institucionales

Stephany, originaria de Ajalpan, Puebla, se había incorporado recientemente a la corporación y estaba asignada al 51° Batallón, ubicado en la Zona Diamante de Acapulco. De acuerdo con testimonios de compañeros y familiares, la víctima había denunciado hostigamiento sexual y laboral por parte del sargento Yair Manuel “N.” semanas antes del ataque.
Sin embargo, las denuncias no habrían recibido atención institucional, lo que ha generado críticas sobre los protocolos internos de protección para mujeres dentro de las fuerzas de seguridad.

Los hechos

El 14 de octubre de 2025, durante una práctica de tiro en el campo de entrenamiento del batallón, Stephany recibió dos disparos en la cabeza con un arma de cargo, falleciendo en el lugar.
El presunto agresor huyó de las instalaciones y hasta el momento se encuentra prófugo.
La GN notificó a los familiares que el deceso se debió a un “impacto accidental de bala”, pero dicha versión fue cuestionada por incongruencias con las pruebas balísticas y el contexto de acoso previo.

Investigación por feminicidio

La Fiscalía General del Estado de Guerrero (FGE) asumió el caso y lo clasificó como feminicidio, emitiendo una orden de aprehensión contra el sargento.
Autoridades estatales y federales mantienen operativos en Acapulco y zonas cercanas para localizarlo, con revisiones en terminales y puntos de acceso terrestre.

El cuerpo de Stephany fue sometido a necropsia, y aunque su entrega a la familia se retrasó —lo que ha sido denunciado como una posible obstrucción—, finalmente llegó a Ajalpan para su velorio el 16 de octubre.

Exigencias de justicia y silencio oficial

Hasta ahora, la Guardia Nacional no ha emitido un comunicado público sobre el caso, pese a haber informado inicialmente a la familia.
La madre de la víctima, María Fernanda Carmona, exigió justicia y esclarecimiento total, denunciando falta de apoyo institucional.
El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, expresó su respaldo a la familia y confirmó la coordinación entre las fiscalías de Puebla y Guerrero para avanzar en la investigación.

Implicaciones y contexto

El asesinato de Stephany Carmona evidencia las fallas estructurales en la atención a casos de violencia de género dentro de las corporaciones de seguridad mexicanas, donde mujeres uniformadas enfrentan riesgos adicionales de acoso y represalias.
En Guerrero, uno de los estados con mayor incidencia de feminicidios, el caso ha reavivado la discusión sobre la responsabilidad institucional y la necesidad de reformas internas en la GN y la SEDENA.

La FGE mantiene abiertas las líneas de investigación y se espera que la captura del prófugo permita esclarecer completamente los hechos.
Familiares, organizaciones y colectivos feministas han exigido que el caso no sea archivado y que se fortalezcan los mecanismos de protección y denuncia dentro de las fuerzas armadas.







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