La fiscalía de Guerrero confirmó la localización sin vida de 11 de las 17 personas, integrantes de una familia de Chautipan, quienes se habían reportado desaparecidas desde el pasado mes de octubre.
Dicha familia, desde hace 10 años, vendía trastes en la región de Chilapa, a donde se trasladaron inicialmente 10 personas el pasado 21 de octubre, y quienes nunca regresaron.
Posteriormente otros 7 familiares fueron a buscarlos, y también se reportaron como desaparecidos durante semanas.
Finalmente, 11 de los integrantes de esta familia, se encontraron desmembrados, en la batea de una camioneta abandonada encendida, a escasa distancia de la Fiscalía de Guerrero en Chilpancingo.
Días antes, en redes sociales circuló un video donde se torturaba a uno de los jóvenes desaparecidos, y donde lo acusaban de estar tomando fotografías que presuntamente serían entregadas a un grupo antagónico del crimen organizado.
Entre las víctimas que se localizaron en Chilpancingo, se encontraban dos mujeres y cuatro menores de edad, además de que otras 6 personas de la misma familia continúan desaparecidas.
El gobierno de Evelyn Salgado condenó estos hechos, y afirmó que se encuentra dando el acompañamiento necesario a las familias de las víctimas, al tiempo que continúan las investigaciones para tratar de dar con los responsables.
Versiones periodísticas de reporteros locales, afirman que la fiscalía retiró la camioneta de la vía pública de forma apresurada, sin haber acordonado el área y recabar evidencia en la escena del crimen; no obstante que la presidenta Claudia Sheinbaum, en su conferencia mañanera negó tales versiones, y señaló que la fiscalía de Guerrero le informó que todo el trabajo pericial se estaba realizando de conformidad con los protocolos establecidos.
