En su conferencia matutina del 5 de febrero de 2025, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, abordó la situación en Medio Oriente, focalizándose en la posición de México respecto al conflicto entre Palestina e Israel. Desde Querétaro, donde se encontraba con motivo de la conmemoración del Día de la Constitución, Sheinbaum reafirmó la postura histórica y actual de México de reconocer tanto al Estado Palestino como al Estado de Israel.
Sheinbaum, hablando con claridad y determinación, declaró: «México ha tenido una posición desde hace años del reconocimiento del Estado Palestino y al mismo tiempo, del Estado de Israel. Esa es la política del gobierno mexicano de hace años y de ahora. De la necesidad de reconocer a ambos Estados y de construir una salida pacífica». Esta declaración subraya la continuidad de la política exterior mexicana que busca la paz y el reconocimiento mutuo como la vía para resolver conflictos.
Su comentario llegó en un contexto de creciente preocupación internacional por la escalada de tensiones en Gaza, especialmente después de advertencias y acciones por parte del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sobre intervenir en la región. Sheinbaum hizo hincapié en la importancia de encontrar una solución pacífica, rechazando cualquier forma de violencia y promoviendo el diálogo como herramienta clave para la resolución de conflictos.
Además de abordar el tema palestino-israelí, la presidenta mencionó la relación con España, señalando un «temita» pendiente, pero asegurando que existe una muy buena relación entre ambos países. Este punto fue relevante en el contexto de las solicitudes de México para que España pida perdón por los abusos cometidos durante la conquista, un tema que ha sido motivo de debate diplomático.
La conferencia también tocó otros puntos de la agenda nacional, como la suspensión de aranceles anunciados por Trump, que Sheinbaum confía en que se convierta en una medida permanente, y el récord en el envío de remesas en 2024. Sin embargo, fue su postura sobre Palestina e Israel lo que capturó la atención internacional, reflejando la preocupación de México por los derechos humanos y la paz mundial.
La insistencia de Sheinbaum en una «salida pacífica» y el reconocimiento de ambos estados refleja una postura diplomática que busca equilibrar las relaciones internacionales y promover un escenario de paz en una región históricamente conflictiva. Este enfoque también resuena con las acciones anteriores de México en foros internacionales, donde ha abogado por la resolución de conflictos mediante el diálogo y el respeto a los derechos soberanos de todas las naciones.
