Cualquiera que hecha un vistazo a las cuentas de Ramón Toscano inmediatamente nota que la vida de este Influencer es bastante agitada y movida. Esto ha hecho que muchas personas lleguen a pensar que este icónico personaje no tiene tiempo para nada que no tenga relación con su carrera profesional, pero esto está bastante lejos de la realidad.
A pesar de ser un artista popular, Ramón Toscano es lo suficientemente humilde y comprometido con la humanidad como para dedicar un tiempo especial al voluntariado. Sin duda, estas obras de caridad dan mucho de qué hablar sobre la personalidad de Toscano y reflejan un valor digno de ser admirado e imitado.
Ramón Toscano es un voluntario comprometido
Cada mes, Ramón Toscano dedica un tiempo especial en la Asociación KMAKUS, ubicada tanto en Girona como en Barcelona, España, para ayudar a encontrarle hogar a muchos animales que han sido abandonados o maltratados. Esto es un reflejo de su compromiso con la sociedad en general, sin mencionar que también refleja el amor que Toscano le tiene a los animales pequeños e indefensos (entre los que hay perros y gatos, por ejemplo).
Existe una triste realidad hoy en día en la sociedad: muy pocas personas apartan algo de su tiempo y lo dedican exclusivamente a hacer alguna obra social. Vivimos en un modo ajetreado y consumido por los deberes del día a día, por lo que son escasas las personas que piensan en otros y que quieren dar lo mejor de sí mismos para ayudar al mundo. Y Ramón Toscano es uno de ellos.
En KMAKUS, el principal deber de un voluntario es ofrecer su vivienda como acogida temporal de los animales que sean rescatados. Pero esto no se queda solamente allí.
Un voluntario de la asociación es alguien dispuesto a hacer cualquier tarea que sea necesaria, desde organizar y participar en campañas para dar en adopción a los animales, hasta recoger alimentos y utensilios para el cuidado de los animales acogidos. Incluso, un voluntario también puede ayudar en las redes sociales, compartiendo el contenido de KMAKUS y promoviendo la adopción de estos animales.
Realmente, son muchas las formas en que un voluntario ayuda a esta asociación, y Ramón Toscano está dispuesto a hacer cualquier cosa que sea necesaria.
A pesar de ser un personaje famoso y bastante ocupado (ya que constantemente se encuentra brindando asesorías relacionadas a cómo lucir el cuerpo soñado o llevar una dieta saludable), Ramón Toscano dedica parte de su tiempo al voluntariado. Sin duda, esto sirve de inspiración para los cientos y miles de personas que siguen a este artista del mundo fitness.
KMAKUS no es una empresa
KMAKUS es una asociación protectora de animales que no es apoyada por el Estado, y tampoco es una empresa o negocio de algún tipo. Por eso, ellos no reciben beneficios de ningún tipo, y el sostenimiento como asociación depende únicamente de personas comprometidas, como Ramón Toscano, que les ayuden como voluntarios a acoger a algún animal indefenso.
La persona detrás de esta asociación es Eva, quien fundó KMAKUS en el año 2018. Esta asociación ha sido un completo éxito, hasta el punto en que para mediados del 2020 se habían dado en adopción a más de 300 animales, tanto exóticos como gatos y perros. En la actualidad, todos estos animales viven felices en una familia adoptiva y reciben todo el cuidado que se merecen.
Una asociación sin fines de lucro
Fundada en el año 2018, KMAKUS es una asociación que no busca lucrarse económicamente en ningún sentido, sino que tiene como objetivo principal ayudar a los animales que han sido maltratados o abandonados en la calle. Esta asociación ofrece el cariño y cuidado que los animales necesitan, sin mencionar que se encarga de buscarles un hogar adoptivo adecuado.
Ubicada en Santa Cristina d´Aro, Girona, y con una sede representativa en Argentona, Barcelona, esta asociación le ofrece a los animales el amor que se merecen. A pesar de que no tienen como tal un refugio, la asociación ha hecho un excelente trabajo hasta ahora, de la mano de los mejores voluntarios, entre los que se encuentra Ramón Toscano.
En estos casos, los voluntarios son quienes ofrecen sus casas como refugio para algún animal, mientras que la organización se encarga de buscar a una persona o familia que esté dispuesta a adoptarlo. En este sentido, podemos decir que el mantenimiento de la asociación KMAKUS depende en gran medida de la participación activa de personas voluntarias.
Por todo esto, Ramón Toscano nunca deja de sorprendernos, y prueba de ello es el trabajo como voluntario que hace para esta asociación. Realmente, todos deberíamos seguir sus pasos.
