Este miércoles se aprobó una histórica resolución en la Asamblea General de la ONU en defensa de la soberanía palestina, y que representan también la primer serie de sanciones impuestas en 42 años al régimen de Israel.
Se trata de una serie de vetos económicos, políticos, militares y comerciales, que son el producto de la resolución emitida el pasado mes de julio por la Corte Internacional de Justicia.
La resolución fue aprobada de forma categórica con el voto a favor de 124 países, mientras que se presentaron 43 abstenciones y solo 12 naciones votaron en contra.
México, fue uno de los 124 países que votaron a favor, junto con otros gobiernos de América Latina como Colombia y Bolivia, estos últimos además tomaron un papel protagónico como parte de la lista de naciones que elaboraron el proyecto de resolución.
Entre las naciones que apoyaron esta iniciativa, también se encuentran potencias como Rusia, China, Japón, Arabia Saudita, Brasil, Francia, España, Irán y los Emiratos Árabes Unidos.
Entre los pocos que votaron en contra, además de Israel y sus cómplices, los Estados Unidos, se incluyen también gobiernos como Argentina, Paraguay, Chequia y Hungría, además de pequeñas islas de Oceanía.
Medidas ilegales israelíes en la Jerusalén Oriental Ocupada y el resto del Territorio Palestino Ocupado
En el documento aprobado se establece una obligación para que el estado de Israel, abandone sin demora su presencia ilegal en el Territorio Palestino Ocupado, señalando un plazo máximo de 12 meses, a partir de la aprobación de esta resolución.
La ONU, instó a Israel a retirar a todas sus fuerzas militares de Territorio Palestino, incluyendo también un fin al despojo de su espacio aéreo y marítimo.
Además de exigir que se permita el retorno de todos los desplazados palestinos, conminó al régimen judío a reparar todos los daños causados a las personas físicas y jurídicas de Palestina.
Se trata de una resolución histórica, pues también exhorta a todos los estados miembros de la ONU, a cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional, lo cual significa tácitamente dejar normalizar y seguir manteniendo nexos con la entidad investigada por la comisión de genocidio, y particularmente en lo referente a la presencia ilegal en territorio palestino.
La ONU, aprobó esta resolución que señala que los estados miembro, también están obligados, entre otras medidas, a:
» – No reconocer como legal la situación derivada de la presencia ilegal de Israel en el Territorio Palestino Ocupado.
– No prestar ayuda ni asistencia para mantener la situación creada por la presencia ilegal de Israel en el Territorio palestino.
– No reconocer ningún cambio en el carácter físico o la composición demográfica, la estructura institucional o el estatuto del territorio ocupado por Israel el 5 de junio de 1967, incluida Jerusalén Oriental
– Abstenerse de mantener relaciones convencionales con Israel en todos los casos en que pretenda actuar en nombre del Territorio Palestino Ocupado o de una parte de él en asuntos que afecten al Territorio Palestino Ocupado o a una parte de su territorio
– Abstenerse de entablar relaciones económicas o comerciales con Israel en lo que respecta al Territorio Palestino Ocupado o partes de él que puedan afianzar su presencia ilegal en el Territorio, incluso en relación con los asentamientos y su régimen asociado.
– Abstenerse, en el establecimiento y mantenimiento de misiones diplomáticas en Israel.»
Los países firmantes, también «deploraron enérgicamente el continuo y total desprecio por el Gobierno de Israel de las obligaciones que le incumben en virtud de la Carta de las Naciones Unidas, el derecho internacional y las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas y los incumplimientos de esas obligaciones, y destaca que tales incumplimientos amenazan gravemente la paz y la seguridad regionales e internacionales».
Asimismo, reconocieron la necesidad de que Israel rinda cuentas ante el derecho internacional por todas las vejaciones cometidas contra el pueblo palestino.
De igual forma se hizo un llamado para establecer un mecanismo internacional para agilizar la reparación de los daños y perjuicios derivados de la ocupación ilícita de Israel en territorio palestino, además del establecimiento de medidas de seguimiento para vigilar el cumplimiento de esta resolución.
A pesar de que la mayor parte del mundo ratificó una posición clara y humanitaria en el conflicto, el régimen de Israel se burló una vez más de esta resolución y de los firmantes, a quienes calificó como «La Marcha de la Locura».
La crisis con Líbano
De forma paralela a esta histórica resolución, este mismo miércoles el Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la ONU, emitió también una severa condena a los actos terroristas perpetrados por el régimen israelí desde el día de ayer contra el Líbano, donde hicieron explotar miles de artefactos electrónicos en manos de civiles.
«Atacar simultáneamente a miles de personas, civiles o miembros de grupos armados, sin saber quién tenía los artefactos, su ubicación y entorno durante el ataque, viola el derecho internacional. Quienes ordenaron y llevaron a cabo este ataque deben rendir cuentas«, señaló el comisionado Volker Türk desde Genova.
"Atacar simultáneamente a miles de personas, civiles o miembros de grupos armados, sin saber quién tenía los artefactos, su ubicación y entorno durante el ataque, viola el derecho internacional.
Quienes ordenaron y llevaron a cabo este ataque deben rendir cuentas".#Líbano pic.twitter.com/c7GZ7RZrKR— Noticias ONU (@NoticiasONU) September 18, 2024
Cabe señalar que este miércoles, se registró una segunda ola de explosiones en Líbano, que abarcó una mayor gama de dispositivos, incluidos desde vehículos, hasta equipos de comunicación y detectores de huellas.
El secretario de defensa del régimen sionista, también advirtió que la «guerra» ha entrado en una nueva fase, y confirmó la movilización de tropas hacia la frontera con Líbano.
Ante la advertencia de Hezbollah acerca de una contundente respuesta a esta nueva serie de atentados del régimen terrorista contra el pueblo de Líbano, se teme una escalada bélica en Oriente Medio, lo que ha llevado a que diversas embajadas adviertan a sus ciudadanos sobre la presencia en la región.
El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres también expresó su preocupación por esta nueva serie de ataques terroristas, y condenó la muerte de civiles en el conflicto.
«Estoy profundamente alarmado por los informes de que un gran número de dispositivos de comunicación explotaron en Líbano y Siria, matando al menos a 11 personas, incluidos niños, e hiriendo a miles.
Todos deben actuar con la máxima moderación para evitar una nueva escalada».
I’m deeply alarmed by reports that a large number of communication devices exploded across Lebanon & Syria, killing at least 11 people, including children, and injuring thousands.
All actors must exercise maximum restraint to avert any further escalation.
— António Guterres (@antonioguterres) September 18, 2024