La candidatura presidencial de Joe Biden se tambalea, y parece que en cualquier momento estará desertando de sus aspiraciones de manera oficial.

Lo que antes eran críticas de los opositores, se han convertido en «recomendaciones» persistentes de sus más importantes aliados, quienes continúan presionando de forma cada vez menos discreta, para que el mandatario desista por sí mismo de su aspiración de reelegirse.

Este jueves, trascendió en el Washington Post que el ex presidente Barack Obama, una de las figuras más influyentes en el Partido Demócrata, habría recomendado a Biden hacer un paso de costado en la carrera presidencial.

La Convención Nacional Demócrata, también puso en pausa ayer los planes que se tenían para ratificar su candidatura por votación nominal virtual, confirmando así que se está reconsiderando con bastante seriedad la nominación.

Este jueves, The Atlantic informó también que tres importantes líderes demócratas: el líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer; el líder de la minoría en la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries; y la ex presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi; hablaron cada uno por su cuenta con Joe Biden de forma privada, tratando de convencerlo de que no tiene posibilidad alguna de victoria en las urnas.

De hecho, versiones que han trascendido en medios estadounidenses, refieren que Pelosi habría sido bastante severa, y le habría mostrado sondeos del propio partido, donde se demuestra que estaría en riesgo incluso una posible mayoría absoluta en las cámaras en favor de los republicanos, de mantenerse las tendencias.

Destacan también casos como el senador demócrata Peter Welch, quien de igual forma está haciendo esfuerzos por convencer a Biden de la importancia de retirar su postulación; e incluso ya se tiene también un recuento de al menos 20 demócratas de la Cámara de Representantes, que están presionando fuerte para que Biden desista formalmente; además de varios industriales y empresarios que han empezado a retirar apoyos al partido.

Al parecer, la decisión ya está tomada, no obstante que Biden y su equipo más cercano, estarían evaluando el momento propicio de anunciarlo, toda vez que dependiendo de si su deserción se presenta antes, o después, de la postulación en la Convención Demócrata, el proceso a seguir para elegir al sucesor, también resulta distinto.

Aunque sigue sonando la posibilidad de Kamala Harris, al parecer al mismo Joe Biden no le agrada mucho la idea, y este sería en realidad el principal problema que está siendo deliberado en el Partido Demócrata; es decir, la definición de quién representa la mejor carta, para competir contra un Donald J. Trump que se ha fortalecido enormemente tras sobrevivir al intento de asesinato en su contra.

En todo caso, parece que puede ser cuestión de días, o incluso horas, para que Biden exprese su mensaje a la nación, confirmando oficialmente su deserción de su candidatura presidencial, principalmente debido a su deteriorado estado de lucidez.