La Cruz Roja Mexicana, a través de su Delegación en el Estado de México, llevó a cabo la entrega de ayuda humanitaria a 180 personas afectadas por las recientes lluvias e inundaciones registradas en comunidades de la región poniente de la entidad.
Las familias damnificadas, provenientes de Tacuitapan, Rincón Grande y San Pedro Ixtapantongo, se encuentran albergadas en el auditorio municipal de Santo Tomás de los Plátanos, habilitado desde el pasado 4 de octubre ante los deslaves, desbordamientos de ríos y cierres de caminos ocasionados por las precipitaciones.
Durante la jornada, personal y voluntariado de la Cruz Roja distribuyó 50 paquetes de limpieza doméstica, artículos de higiene personal, despensas y cobijas, con el objetivo de cubrir las necesidades básicas de los afectados y mejorar sus condiciones temporales de resguardo.
El vicepresidente nacional y delegado estatal de la institución, Jorge Alberto Forastieri Muñoz, subrayó que la ayuda entregada no tiene vínculos con partidos políticos ni con niveles de gobierno, sino que proviene de las donaciones de personas, empresas e instituciones que responden a los llamados humanitarios. “Cruz Roja está aquí con quienes lo necesitan, para ayudarles a superar este difícil momento que ha afectado su vida y su entorno”, afirmó.
En el lugar también participó el presidente municipal Ismael Félix Matías Domínguez, quien reconoció el esfuerzo de los equipos de rescate y voluntarios que lograron llegar al albergue pese a que varias rutas de acceso permanecen afectadas, particularmente las que comunican con Valle de Bravo.
Entre los damnificados, Reyna Hernández Loza, vecina de una de las comunidades afectadas, expresó su agradecimiento por la rápida respuesta de la Cruz Roja, destacando que la institución “siempre está ahí para ayudar a todos los mexicanos en los momentos más difíciles”.
La operación humanitaria contó con el apoyo de voluntarios de las delegaciones de Valle de Bravo, Huixquilucan, Atizapán de Zaragoza y Naucalpan, coordinados por Alfonso Salas Lomelí, Diego Luisillo y Mateo Quintero Galván, responsables estatales del área de socorros.
Con esta acción, la Cruz Roja Mexicana reafirmó su compromiso con los principios de humanidad, imparcialidad, neutralidad e independencia, así como su labor permanente de salvar vidas y aliviar el sufrimiento humano frente a las emergencias.
