Salario mínimo subirá 13% en 2026 y arranca plan para llegar a la semana de 40 horas

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La conferencia mañanera de este miércoles estuvo marcada por uno de los anuncios laborales más relevantes del sexenio: el incremento al salario mínimo para 2026 y la presentación del plan gradual para implementar la jornada laboral de 40 horas. Ambos acuerdos, según destacó la presidenta Claudia Sheinbaum, fueron alcanzados por consenso total entre gobierno, empresarios y sindicatos.

Incremento al salario mínimo: recuperación histórica del poder adquisitivo

El punto más destacado fue el aumento del salario mínimo general, que crecerá 13 por ciento a partir del 1° de enero de 2026, pasando de 278.80 pesos a 315.04 pesos diarios, equivalente a 9 mil 582.47 pesos mensuales. En la Zona Libre de la Frontera Norte, el alza será del 5 por ciento, para quedar en 440.87 pesos diarios.

El secretario del Trabajo, Marath Bolaños, detalló que con este ajuste el salario mínimo habrá recuperado más del 154 por ciento de su poder adquisitivo desde el inicio de los gobiernos de la llamada Transformación, alcanzando niveles no registrados desde 1980. En el caso de la frontera norte —donde el incremento acumulado ha sido mayor— la capacidad de compra ya equivale a 2.8 canastas básicas, superando incluso la ruta trazada hacia 2030.

El funcionario destacó que el aumento mantiene la línea de incrementos por encima de la inflación sin generar presiones inflacionarias, según análisis realizados junto con Hacienda y Banco de México.

Hacia la semana laboral de 40 horas: reducción gradual de 2027 a 2030

El otro anuncio clave fue la presentación del Proyecto de Reforma para establecer una semana laboral de 40 horas, con implementación gradual. La iniciativa, construida tras más de 40 mesas de diálogo a nivel nacional, plantea:

  • Jornada semanal de 40 horas, elevada a rango constitucional y plasmada en la Ley Federal del Trabajo.
  • Sin reducción salarial, ni afectaciones a prestaciones.
  • Prohibición expresa de que menores de edad trabajen horas extras.
  • Un esquema escalonado que reduciría 2 horas por año a partir de 2027, hasta llegar a las 40 horas en enero de 2030.
  • Regulación más estricta del tiempo extra: máximo de 12 horas semanales, con pago obligatorio al doble y, en casos específicos, al triple.
  • Obligatoriedad para los empleadores de llevar un registro claro de horas ordinarias y extraordinarias.

Según expuso Bolaños, una semana laboral más corta traerá beneficios en productividad, salud y bienestar, alineados con experiencias internacionales y estudios de la Organización Internacional del Trabajo.

Consenso empresarial y respaldo sindical

Representantes empresariales y líderes sindicales coincidieron en que las medidas representan un avance en justicia laboral y desarrollo económico. Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, subrayó que el acuerdo fue posible gracias al diálogo tripartito y destacó que las empresas están comprometidas con mantener la paz laboral y acompañar la transición hacia la nueva jornada.

Por su parte, Reyes Soberanis, presidente del Congreso del Trabajo, calificó la reforma de 40 horas como un cambio histórico que los trabajadores “respaldan y defenderán”, al tratarse de una demanda postergada desde hace décadas.

Sin impacto inflacionario, asegura el gobierno

Ante cuestionamientos sobre posibles efectos en los precios, la presidenta Sheinbaum afirmó que Hacienda y Banco de México participaron en el análisis, concluyendo que los incrementos salariales no generarán presiones inflacionarias. El secretario del Trabajo reforzó que los ajustes se realizaron dentro de parámetros técnicos y han mostrado, en años recientes, no elevar la inflación.

Con estos anuncios, el gobierno presenta avances concretos en dos compromisos laborales incluidos en los “100 compromisos del Segundo Piso de la Transformación”: alcanzar 2.5 canastas básicas con el salario mínimo hacia 2030 y cumplir la transición a una semana de 40 horas.

La iniciativa será enviada al Congreso para iniciar su ruta legislativa durante 2026 y, de aprobarse, marcaría la primera modificación de fondo a la jornada laboral desde la Constitución de 1917.

 








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