La Guardia Civil de Zamora ha concluido un informe preliminar que identifica las causas del trágico accidente de tráfico que acabó con la vida del futbolista del Liverpool, Diogo Jota, y su hermano, André Silva, en la madrugada del 3 de julio de 2025.
El siniestro, ocurrido en la autovía A-52, a la altura del municipio de Cernadilla, en la provincia de Zamora, España, ha sido atribuido a una combinación de exceso de velocidad y el reventón de un neumático trasero del vehículo en el que viajaban.
Según el informe pericial elaborado por el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil, Diogo Jota, de 28 años, era quien conducía el Lamborghini Huracán, un automóvil de alta gama alquilado días antes en Barcelona.
Las autoridades han determinado que el vehículo circulaba a una velocidad significativamente superior al límite de 120 kilómetros por hora establecido en esa vía. Durante un adelantamiento, el reventón de una rueda trasera provocó que el coche perdiera el control, saliera de la calzada y se estrellara contra un guardarraíl.
El impacto causó un trompo, dejando el vehículo atrapado entre dos barreras de seguridad, lo que desencadenó una explosión debido a la rotura del depósito de combustible. El incendio resultante, que se extendió a la vegetación cercana, imposibilitó la supervivencia de los ocupantes, según fuentes de la investigación.
La identificación de Diogo Jota como conductor se basó en pruebas forenses, incluyendo cadenas y adornos encontrados en los restos, ya que el fuego dificultó la identificación directa de los cuerpos. La Guardia Civil también está analizando las marcas de los neumáticos en el asfalto para confirmar la dinámica del accidente, aunque el informe aún no está finalizado y será presentado al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Puebla de Sanabria, que ha asumido las diligencias.
El accidente ocurrió mientras los hermanos se dirigían a Santander, donde Jota planeaba tomar un ferry hacia Inglaterra para iniciar la pretemporada con el Liverpool. Esta decisión se tomó debido a una recomendación médica que desaconsejaba viajar en avión por un problema pulmonar reciente, según reportes de medios portugueses. El vehículo, un Lamborghini Huracán capaz de alcanzar velocidades de hasta 235 kilómetros por hora, es conocido por su potencia, pero también por ser difícil de manejar sin experiencia en conducción de alto rendimiento.
A pesar de especulaciones iniciales sobre el estado de la carretera, la Guardia Civil ha descartado que el tramo de la A-52 donde ocurrió el siniestro sea un punto negro, afirmando que es seguro para circular incluso a velocidades de hasta 140 kilómetros por hora. No obstante, las autoridades continúan investigando posibles factores adicionales, como el estado del neumático que reventó, para determinar si hubo defectos mecánicos o condiciones externas que contribuyeron al accidente.