El fútbol portugués vive días turbulentos tras la reciente eliminación del FC Porto en el Mundial de Clubes 2025, un fracaso que ha desatado la furia de los aficionados y ha terminado con la destitución del entrenador argentino Martín Anselmi.

La decisión, tomada por la directiva del club y filtrada por el medio Maisfutebol, marca el fin de una etapa marcada por expectativas incumplidas y un rendimiento que no estuvo a la altura del prestigio del «Dragão».

Anselmi, quien llegó al banquillo del Porto procedente de una polémica «fuga» del Cruz Azul en enero de 2025 para reemplazar a Vítor Bruno, firmó un contrato que aún tiene dos años y medio de vigencia. El técnico argentino, está exigiendo el pago total de los honorarios acordados, lo que asciende a aproximadamente siete millones de euros. Esta cifra representa un desafío financiero significativo para el club, especialmente tras haber invertido en tres cambios de entrenador en una sola temporada, un hecho que ha generado burlas entre los aficionados rivales y críticas hacia la gestión de André Villas-Boas, presidente del Porto.

El estancamiento en las negociaciones entre la directiva y Anselmi ha retrasado la oficialización de su salida, pues el club portugués estaría intentando llegar a algún acuerdo mutuo que permita aligerar la carga económica para el Porto. No obstante que la decisión sobre la salida de Anselmi, ya está tomada. El desembolso podría limitar los recursos disponibles para contratar a un nuevo técnico, en un momento en que el Porto necesita urgentemente revitalizar su proyecto deportivo tras una campaña decepcionante tanto en la liga portuguesa como en competiciones europeas.

La gota que colmó el vaso para los hinchas del Porto fue la eliminación en el Mundial de Clubes 2025, donde el equipo cayó 2-1 ante un Inter Miami liderado por Lionel Messi. El mundial expuso las carencias tácticas de Anselmi y dejó al club fuera de la competición en una fase temprana, un resultado inaceptable para una institución con la historia del Porto.

Apenas regresó a Portugal, los aficionados se congregaron fuera del Estádio do Dragão para expresar su descontento, con cánticos contra la directiva y el entrenador, a quienes culpan por el «papelón» internacional.

Las protestas, que incluyeron pancartas con mensajes como «Fuera Anselmi, fuera la directiva» y «Queremos fútbol, no excusas», reflejan el hartazgo de una afición que había recibido con ilusión la llegada del técnico argentino. La policía tuvo que utilizar incluso balas de goma para dispersar las protestas, según reportes de medios locales.