La precandidatura del actor, Eduardo Capetillo, es una violación a los estatutos del PRI y una imposición a la militancia de Ocoyoacac, denunciaron ex alcaldes de ese municipio.
Francisco Javier López. Apocaliptic.com
Fotos: Sergio Sánchez Hidalgo
25 de enero 2018.- Priistas de Ocoyoacac, inconformes con la precandidatura de Eduardo Capetillo Vázquez, para la presidencia de ese municipio, denunciaron que el actor, no pertenece a la demarcación que pretende representar, además su credencial de elector, lo ubica como ciudadano de la delegación de Cuajimalpa, en la Ciudad de México, acusaron.
Los ex alcaldes Tito Castillo González y Santiago Rivera Guadarrama, junto con otros 9 correligionarios priistas, rechazaron la posible candidatura a presidente municipal, del ex cantante del ochentero grupo musical, Timbiriche, a quien a su vez acusaron de tener una ciudadanía no definida, pues cuando Ocoyoacac le pretende cobrar impuestos, se dice habitante de Capulhuac y viceversa, cuando se siente presionado por las autoridades de este último, se hace pasar por ocoyoacanense.
En rueda de prensa, los declarantes afirmaron que en este municipio, hay 13 priistas que aspiran a ser los sucesores de la alcaldesa Diana Pérez Barragán. En estos militantes, indicaron, hay arraigo, trabajo comunitario, conocimiento de la problemática social y sobre todo “mucho amor por Ocoyoacac”, asentaron.
Los quejosos afirman haber sido engañados por las dirigencias estatal y municipal del PRI, puesto que, a decir de ellos, se les aseguró que el candidato de la coalición liderada por el partido, sería un militante de cepa.
De acuerdo con los denunciantes, en Ocoyoacac, la gente no quiere a Eduardo Capetillo, porque nunca ha estado en el municipio, salvo en últimas fechas, por la proximidad de las definiciones para la candidatura, aseguraron.
Finalmente, informaron que el pasado miércoles realizaron una espontánea marcha, en la cabecera municipal, para repudiar la precandidatura del actor y ex cantante; la cual, aseguraron, tuvo una nutrida participación de ciudadanos, no sólo de priistas, sino también de gente sin filiación partidista.
Su descontento, aclararon, no tendrá repercusiones violentas ni vandálicas, todo lo harán conforme al estado de derecho, precisaron.
