Alguien sabe cuántos militantes debe tener un membrete partidista…
La “morralla partidista” — diría el clásico, — salió a cumplir su misión, en franca “colusión”, no coalición, con los membretes tradicionales con gastos pagados por los causantes; servirán al membrete que mejor les garantice su vida, su permanencia en el presupuesto y una que otra posición oficial, cuántos membretes partidistas locales “autorizó” el INE, en el País?…
Así, se pulverizó la voluntad electoral ciudadana…
Las “jugosas” experiencias, adquiridas por los “gerentes” de “nuevos” grupos, presentados al respetable como membretes partidistas, para participar con “candidatos” forjados en “microondas industriales” de los grupos en cuestión para “rellenar” la justa electoral, gastando lo ajeno, ofreciendo lo que ya hay en muchos lados, repartiendo lo que no le costó, haciendo su periplo de campaña, como si fueran verdaderos redentores de la sociedad mexiquense y por ende de la mexicana; para redimir a los marginados en sus distritos…
Los chapulines y los repetidores se “cosen” aparte…
El espectro de membretes partidistas que tendrán las boletas confundirá, a los votantes, no electores; porque los mexicanos votamos, no elegimos a nuestros candidatos; las “gerencias”, que no “dirigencias partidistas”, tienen los peores antecedentes en la materia y han registrado candidatas y candidatos que en lugar de dar coraje o risa dan lástima, — de la buena, — qué va a hacer, una figura del espectáculo, en el recinto legislativo; una vedette en cualquier Presidencia Municipal, lo que realmente persiguen, a pesar de saberse usados es teatro electoral, todo pagado por los contribuyentes…
El INE, halló la manera de alterar resultados antes de la votación…
Dicta una conseja popular: “el primer acto de corrupción en el que incurren los ciudadanos, es aceptar un cargo, para el que no está preparado”; en éste esquema podemos insertar tanto a los membretes partidistas, nuevos, reciclados y “restaurados”, como los candidatos que apadrinan, postulando a los cargos que no saben ni qué onda, sobre el asunto se convierten en comparsas de los tiburones de la “mexicana política”, que dictan las normas al gusto de sus intereses; ganen o no se divirtieron membretes y candidatos con recursos públicos, de los impuestos que el mexicano paga… Continuará… X180
