Por: Juan Carlos Lara Escobedo/Apocaliptic.com
Toluca, México, 2 de marzo de 2017.- El fiscal general de justicia mexiquense, Alfredo Gómez Sánchez, confirmó que el presunto agresor de la “prepa 2” de Toluca es alumno de la Universidad Autónoma del Estado de México y tiene 16 años. El joven fue sorprendido en los baños de la escuela cuando pretendía fabricar una bomba casera y aunque oficialmente no se ha ventilado información sobre cuáles eran sus intenciones con el artefacto explosivo, investigaciones de este reportero revelaron que planificó un atentado en el que cuando menos atacaría a 14 estudiantes cortando incluso cabezas para posteriormente suicidarse.
De acuerdo a las fuentes consultadas, en su declaración el joven agresor reconoció dichas intenciones y sólo dijo “buscar reconocimiento”. La tragedia planeada por el menor de edad se evitó porque la casualidad así lo quiso, fue sorprendido cuando prepara los explosivos en los baños de la “legendaria” Prepa 2 y una se detonó antes de tiempo, lo que frustró sus planes originales pero no evitó que en su huida atacara con un hacha y un cuchillo a 5 de sus compañeros, dos de los cuales sufrieron heridas que necesitaron de cirugía y los otros 3 heridas menores.
En su carrera, el presunto agresor intentó cubrirse el rostro con vendas y tiró la credencial que lo acredita como alumno del Plantel Nezahualcóyotl o Prepa 2 de la UAEMex y gracias a lo cual se le logró ubicar y poner en custodia.
Al momento de los hechos y en su posterior detención, el joven detenido presentaba síntomas de intoxicación por alguna droga, lo que no le impidió introducirse a la escuela brincando una barda para poder introducir los ingredientes para las bombas, el hacha y el cuchillo que pensaba usar para cortarle la cabeza a cuando menos uno de sus compañeros.
De acuerdo a las fuentes consultadas, en su declaración el joven agresor reconoció haber planificado el atentado y haber aprendido en internet la fabricación de bombas caseras. El hacha la compró días antes y el cuchillo de cocina lo tomó de su casa, mientras las bombas las fue haciendo a hurtadillas en uno de los baños, donde también las escondió.
Y aunque el fiscal se negó a señalar un móvil, en sus primeras declaraciones el joven agresor habría señalado que sólo “buscaba reconocimiento”. Por ahora la Fiscalía tiene detenido al menor, quien por esa misma condición no irá a prisión preventiva, pero se tomarán medidas para evitar que agreda a otros jóvenes o a sí mismo e incluso que haya ataques contra él. Se le realizarán los estudios correspondientes y el Ministerio Público le formulará cargos por lesiones.
Será la autoridad judicial, la Corte, quien determine si el joven debe ingresar a una institución de salud mental y las medidas precautorias que correspondan.
